MEDITACIONES DE LOS MISTERIOS GLORIOSOS DEL SANTO ROSARIO
En este 2023,nos corresponde meditar los Misterios Gloriosos en la jornada de oración «Un Millón de Niños Rezando el Rosario por la Unión y la Paz», ya que 18 de octubre es día miércoles. Hemos elaborado unas meditaciones especiales, que sabemos serán de tu agrado.
También queremos recordarte que en nuestra zona de descarga encontrarás el material de este año, que consta de un afiche y un tríptico, en el cual están estas meditaciones y material formativo que será de gran utilidad.
PRIMER MISTERIO: La Resurrección del Señor. (Mt 28, 5-7)
«El Ángel dijo a las mujeres: «No tienen por qué temer. Yo sé que buscan a Jesús, que fue
crucificado. No está aquí, pues ha resucitado, tal como lo había anunciado. Vengan a ver el
lugar donde lo habían puesto, pero vuelvan en seguida y digan a sus discípulos: Ha
resucitado de entre los muertos y ya se les adelanta camino a Galilea. Allí lo verán…»
Jesús cumple su promesa de permanecer siempre con nosotros, por lo cual, nunca debemos
perder la Esperanza, porque Dios tiene el poder de vencer al mal y de darnos la gracia para
enfrentar cualquier problema o dificultad.
Oración:
Jesús, ayúdanos a descubrir en tu Resurrección, nuestro maravilloso destino si nos portamos
bien: como Él, también resucitaremos al fin del mundo y seremos eternamente felices (1ª Tes. 4,
16 / 1Corintios 15:20).
SEGUNDO MISTERIO: La Ascensión del Señor al Cielo. (Hch 1, 8- 11)
“Pero recibirán la fuerza del Espíritu Santo cuando venga sobre ustedes, y serán mis testigos
en Jerusalén, en toda Judea, en Samaría y hasta los extremos de la tierra”. Dicho esto,
Jesús se elevó ante sus ojos, hasta que una nube lo ocultó. Ellos seguían mirando fijamente
al cielo mientras se alejaba, pero de repente vieron a su lado a dos hombres vestidos de
blanco que les dijeron: «¿Qué hacen ahí mirando al cielo? Jesús volverá de la misma
manera que ustedes lo han visto subir al Cielo.»»
Recordemos siempre que Dios tiene una vocación para cada uno de nosotros y nos guía, si
lo dejamos, para cumplirla. Confiemos en Él, para alcanzar la verdadera felicidad en esta
vida y en la siguiente.
Oración:
María Santísima, tu que presenciaste cada acto de amor de tu hijo Jesús,
ayúdanos a ser fieles en la fe, y coherentes discípulos suyos en nuestra conducta, por
ejemplo, siendo obedientes con nuestros padres y maestros, sirviendo con amor a los
demás. Amén.
TERCER MISTERIO: La Venida del Espíritu Santo. (Hch 2, 1-4)
«Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos reunidos. De repente vino del Cielo un
ruido, como el de una violenta ráfaga de viento, que llenó toda la casa donde estaban, y
aparecieron unas lenguas como de fuego que se repartieron y fueron posándose sobre cada
uno de ellos. Todos quedaron llenos del Espíritu Santo…”
Después de que Jesús subió al Cielo, envió al Espíritu Santo, es la Tercera Persona de la
Santísima Trinidad que ilumina nuestra vida, ayudándonos a seguir el Camino, la Verdad y la
Vida que es Jesús.
Oración:
Espíritu Santo, tú que les diste a los apóstoles el coraje para compartir el mensaje de Jesús,
a pesar de las dificultades que ello implicaba, danos la valentía para hablar de nuestra fe y
hacer siempre lo correcto. Infunde en nosotros la sabiduría para entender la Palabra de Dios
y hacerla comprender a otros.
CUARTO MISTERIO: La Asunción de la Santísima Virgen María al Cielo. (Lc 1, 46-49)
«María dijo entonces: Proclama mi alma la grandeza del Señor, y mi espíritu se alegra en
Dios mi Salvador, porque se fijó en su humilde esclava y desde ahora todas las generaciones
me llamarán bienaventurada. El Poderoso ha hecho grandes cosas por mí: ¡Santo es su
Nombre!».
La Virgen María, la madre de Jesús, es muy especial para nosotros. Después de vivir una
vida llena de amor y servicio, fue llevada al Cielo en cuerpo y alma. De ella aprendemos la
humildad, la disposición y el amor al prójimo. También es nuestra amada Madre, pues así lo
quiso su Hijo.
Oración:
Virgen María, Madre de Jesucristo y Madre nuestra, en esta época que nos ha
tocado vivir que está en muchos aspectos alejada de Dios, enséñanos a cultivar el valor de la
pureza en nuestros pensamientos, palabras y obras; que tu ejemplo nos motive a dar lo
mejor de nosotros cada día, amando a Dios sobre todas las cosas.
QUINTO MISTERIO: La Coronación de la Santísima Virgen María como Reina de todo lo
creado. (Ap 12,1)
«Apareció en el cielo una señal grandiosa: una mujer vestida del sol, con la Luna bajo sus
pies y una corona de doce estrellas sobre su cabeza.»
Después de ser llevada al cielo, María fue coronada como Reina de la creación. Esto
significa que ella es muy importante y querida por Dios. Debemos amarla y respetarla,
porque siempre intercede por nosotros ante Jesús. María es un ejemplo de amor y bondad, y
podemos pedirle que nos ayude a ser mejores personas cada día.
Oración:
Madre Santísima que eres ejemplo de pureza y santidad, pedimos tu intercesión ante tu hijo
Jesús, para que, siendo valientes, afrontemos con firmeza, compromiso, lealtad y sencillez,
la misión de evangelizar a los que nos rodean, desde nuestro testimonio de servicio y amor.